Neuroliderazgo o cómo conocer y utilizar el cerebro para tomar decisiones en la empresa

El desayuno coloquio de hoy en la CEO, acercó a los asistentes el Neuroliderazgo, una novedosa y eficaz disciplina que se basa en desarrollar destrezas de liderazgo entendiendo cómo funciona el cerebro y aplicando procesos para mejorar las habilidades que se desean desarrollar, facilitando la formación de líderes de alto rendimiento y por tanto equipos de alto rendimiento, lo que desemboca en empresas de éxito.

Marisol Nóvoa, presidenta de la CEO y José Manuel Nogueira, director institucional de Abanca, fueron los encargados de presentar el tema de hoy, y de recordar que los desayunos enmarcados en ‘Nexos encuentros por Ourense’ (colaboración de ambas entidades) surgieron para responder a la necesidad de abordar este tipo de cuestiones tan actuales y de aplicación directa en el mundo empresarial de hoy en día.

Con ejemplos prácticos de cómo funcionan las distintas partes del cerebro (reptiliano, límbico y racional) ante situaciones cotidianas del día a día personal o laboral, la ponente, Eva Muñoz, fue desgranando las ventajas de afrontar este análisis para la toma de decisiones en estos ámbitos, y cómo repercute en el resultado la prevalencia de uno u otro enfoque.

A través de la neurociencia se pueden modificar creencias, patrones, estrategias y objetivos de modo que los líderes puedan potenciar sus capacidades y adoptar responsabilidades compartidas en la toma de decisiones. Ser líder “se fundamenta en la capacidad de empatizar y adaptarse a los interlocutores (trabajadores), pero el Neuroliderazgo da un paso más allá: permite dominar y conocer cómo el lenguaje crea percepciones diferentes entre los colaboradores o incluso como puede ser fuente de motivación”. De hecho, se ha convertido en una disciplina referente para algunas de las mejores organizaciones del mundo (entre ellas varias empresas incluidas en el ranking Fortune 500) que se encuentran implementando procesos de Neuroliderazgo para mejorar el rendimiento de sus directores generales, gerentes y equipos de ventas.

Los beneficios del Neuroliderazgo en las compañías se justifican porque enseña a practicar un liderazgo consciente, a tomar decisiones eficaces, a adaptarse a los nuevos tiempos, a desarrollar una mejor capacidad para comprender y modular la conducta humana y facilita la formación de equipos altamente efectivos, de alto rendimiento.